Fisioterapia y osteopatía
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define en 1958 a la fisioterapia como: “el arte y la ciencia del tratamiento por medio del ejercicio terapéutico, calor, frío, luz, agua, masaje y electricidad. Además la Fisioterapia incluye la ejecución de pruebas eléctricas y manuales para determinar el valor de la afectación y fuerza muscular, pruebas para determinar las capacidades funcionales, la amplitud de movimiento articular y medidas de la capacidad vital, así como ayudas diagnósticas para el control de la evolución”. La Fisioterapia es una disciplina que se encuentra incluida en la Ley de Ordenación de Profesiones Sanitarias.
Por su parte, la Confederación Mundial por la Fisioterapia (WCPT) en 1967 define a la Fisioterapia desde dos puntos de vista:
Desde el aspecto relacional o externo, como “uno de los pilares básicos de la terapéutica, de los que dispone la Medicina para curar, prevenir y readaptar a los pacientes; estos pilares están constituidos por la Farmacología, la Cirugía, la Psicoterapia y la Fisioterapia”
Desde el aspecto sustancial o interno, como “Arte y Ciencia del Tratamiento Físico, es decir, el conjunto de técnicas que mediante la aplicación de agentes físicos curan, previenen, recuperan y readaptar a los pacientes susceptibles de recibir tratamiento físico”.
La Osteopatía es un enfoque asistencial diferente, el cual, a partir de un sistema de diagnóstico y tratamiento específico, pone especial atención en la estructura del individuo y en los problemas mecánicos que en la misma pueden aparecer.
Se basa en los Principios que formuló su precursor: el Dr. A. T. Still (1828-1917) quien, a partir de la cuidadosa observación de sus pacientes y de la aplicación de sus profundos conocimientos de Anatomía y Biomecánica postuló que la salud y el correcto funcionamiento del individuo dependen de la integridad estructural global del cuerpo. Still dibujó al cuerpo humano como una Unidad Indivisible en la que la Estructura (Sistema Músculo-Esquelético, órganos y vísceras) y la Función del organismo están íntimamente relacionadas y dependen la una de la otra.
Se trata de una Terapia únicamente Manual; totalmente complementaria con la medicina alopática o convencional en su objetivo común de ayudar al paciente, y que cabe colocarla dentro de un contexto de prevención, de conservación, y de mejora de la salud.
Mediante la Osteopatía ayudamos a re-equilibrar el organismo centrándonos en la estructura, mejorando de ese modo el funcionamiento del cuerpo. Se utilizan para el tratamiento Técnicas suaves y seguras, adaptadas a cada paciente y a sus necesidades, teniéndose siempre en cuenta la edad, el sexo, la tipología y el estado de salud del mismo, etc.
El osteópata ve al paciente como un todo en el que mente, cuerpo y espíritu interactúan y se relacionan recíprocamente, y en el que los tejidos del mismo, influencian y se ven influenciados por la fisiología interna y la homeostasis. Hablamos de tejidos y no sólo de huesos, ligamentos, músculos y tendones. Los osteópatas trabajan con todos los tejidos y fluidos corporales, aunque a menudo utilicen el sistema músculo-esquelético para llegar a tejidos menos accesibles.